jueves, 26 de noviembre de 2015

ES LO QUE ESPERABAS?

El que espera desespera...dicen

A una semana de situarme en Milán a vistas de comenzar un nuevo trabajo, te empiezas a hacer tus ideas, tus pensamientos de como será el trabajo, los compañeros, la convivencia etc...

Ahí lo que estás haciendo es crear unas EXPECTATIVAS previas a lo que va a ocurrir. Adelantarse a los acontecimientos no es bueno, porque luego te puedes llevar sorpresas. Lo que tenga que ocurrir, ocurrirá y lo único que se puede hacer es que cuando se esté en la situación, intentar actuar de la mejor manera posible, adaptarse y gestionar tus emociones.

Seguramente el trabajo que has realizado en tus estudios no sean los mismos que vas a emprender en otro lugar, el trabajo que puedes encontrar en tu ciudad o su metodología puede que tampoco sean los mismos que en otra ciudad. Toda la fantástica idea de país de piruleta con unicornios y casas de chocolate no tiene porque aparecer al llegar a la nueva oficina de tu nuevo trabajo en una ciudad diferente que pertenece a otro país con otra cultura. Con esto tampoco quiero decir que lo veamos todo negro antes de comenzar, sino simplemente que hay que aceptar que puede que no sea como pensamos, ojalá se acerque lo máximo posible.

Al hacer un cambio de esta índole, hay que afrontarlo con positividad y optimismo, quizás no se trabaja de la misma forma, pero hay que ir preparado para aprender, conocer, vivir la experiencia y pensando que todo saldrá bien. 

Crearse unas expectativas muy fuertes puede crearte una frustración enorme al darte cuenta de que no es exactamente lo que tu habías pensado. pero es que...nadie te ha prometido que va a ser como habías pensado.


"-¿De qué murio?- Se cayó de lo más alto de sus expectativas" 
Foto: San Juan de Luz


Os muestro un pequeño caso que demuestra todo esto: "No estoy aprendiendo nada"

" Llevas 2 meses en Inglaterra, en un hospital privado como enfermera. Nada tiene que ver con lo que estudiaste y te preguntas porqué has venido y qué haces haciendo inventarios; que no has estudiado para hacer eso. Que allí a las enfermeras no les dejan hacer casi nada, hacen cursos para poder hacer cosas básicas. No paras de hacer esos cursos aunque tu ya los tienes aprendidos. Has hablado con tu superior diciéndole que eso ya los sabes hacer tu, que puedes hacer más cosas, que tienes buen nivel de inglés; a lo que te contesta que allí se  funciona así, que es lo que hay."


En este caso, la chica se hizo unas expectativas referentes al modo de trabajo en su ciudad, en el que las enfermeras hacen prácticas a la vez que estudian, que no deben hacer cursos para poder sacar sangre ya trabajando porque ya lo han estudiado y que finalmente, pueden actuar al 100% como enfermeras directamente. Pero esa situación le ha frustrado y no está a gusto. 

Uno no se puede hacer unas expectativas rígidas ya que es otra cultura, otro país y otra metodología de trabajo, no sabes lo que te espera. 

Sucedido esto, solo queda asumir que quiere estar a gusto, relajarse y cambiar ese enfado a un estado positivo para poder afrontar el reto. Cambiar las expectativas en coherencia al lugar donde se encuentra y tener la iniciativa para adaptarse.



Finalmente, no debemos crearnos expectativas sobre lo que ocurrirá; la única idea que debemos tener en la cabeza es la esperanza de que todo saldrá bien y esforzarse por ello.


Saluti ragazzi!

No hay comentarios:

Publicar un comentario